Mi entrenamiento físico

Empecé a entrenar por salud, para cuidar mi característica física (de la que ya os he hablado en otro post) y mejorar mi calidad de vida.

Y aunque ese fue mi punto de partida, con el tiempo fui más allá, empecé a conocerme más y mi motivación cambió.

Soy una persona a la que le gusta mucho cuidar su cuerpo y su aspecto. 

Para mí es muy importante hacerlo ya que son la representación de mi esencia. Son mi unión con ella. Y cuando veo los resultados de mi esfuerzo, esto me llena de satisfacción.

Por ello, mi entrenamiento físico no solo está enfocado en cuidar mi aspecto físico, también está enfocado en cuidarme físicamente.

Antes de irme de esta vida, he tomado la decisión de conseguir los objetivos que me he propuesto para mi cuerpo.

Algo que siempre he anhelado y querido para mi, es mejorar mi flexibilidad y resistencia física.

En estos aspectos quiero conseguir la mejor versión de mi misma, ya que esto me ayuda a estar preparada para vivir las experiencias que quiero experimentar y poder disfrutarlas.

Mi entrenamiento físico ayuda a que mi cuerpo tenga una mayor capacidad a la hora de sostenerme energética y emocionalmente y a poder gestionar mejor mis experiencias de vida.

Por otro lado, como consecuencia de mi entrenamiento, mi aspecto físico mejora y esto es muy importante para mi. Me gusta verme atractiva, me gusta desearme a mi misma y sentirme deseada. Me motiva conseguir la estética que a mi me gusta, la belleza y armonía que quiero para mi.

Mi entrenamiento está basado en dos disciplinas con las que conecto en profundidad: el “Ballet Workout” y el “Yoga Iyengar”. Me identifico con ellas por lo que me ofrecen, por el arte y equilibrio de sus cualidades. Con ellas trabajo mi flexibilidad, fluidez, fuerza, resistencia, equilibrio y profundizo en mi consciencia corporal.

Gracias a la consciencia corporal que obtengo, durante mis experimentaciones, soy capaz de identificar desde qué lugar de mi cuerpo parto, desde donde nace mi energía, mis sensaciones, mi fuerza física y cómo me muevo en consecuencia en cada situación.

Todo esto me ayuda a vivir y disfrutar de cada experiencia, fluyendo con lo que siento en mi cuerpo en cada momento.